Volver a revisar nuestras guardias

Por José Luis Ibaldi -  Mañanas de Campo

Hace unos nueve años, en esta columna leí un pequeño cuento de Eduardo Galeano, denominado “El banquito”. Y, como “el público se renueva”, voy a repetirlo:

 

“Sixto Martínez cumplió el servicio militar en un cuartel de Sevilla. En medio del patio de ese cuartel, había un banquito. Junto al banquito un soldado hacía guardia. La guardia se hacía porque se hacía, noche y día, todas las noches, todos los días, y de generación en generación los oficiales transmitían la orden y los soldados la obedecían. Nadie nunca dudó, nadie nunca preguntó. Si así se hacía, y siempre se había hecho, por algo sería. Y así siguió hasta que alguien, no sé qué general o coronel, quiso conocer la orden original. Hubo que revolver a fondo los archivos. Y después de mucho hurgar, se supo. Hacía treinta y un años, dos meses y cuatro días, un oficial había mandado montar guardia junto al banquito, que estaba recién pintado, para que a nadie se le ocurriera sentarse sobre la pintura fresca”.

 

Hay que revisar muchas guardias en la Argentina en general, pero también las de nuestro sector agropecuario en particular. Tenemos mucho para revisar tranqueras adentro y tranqueras afuera. Hay que revisar la guardia de nuestra gestión. Cuidado con las repeticiones. El método de gestión necesita apropiación y administración de los tiempos con inteligencia, evitando caer en las trampas del facilismo y los peligros que importa el ímpetu o la ansiedad del principismo a ultranza.

 

Hay que revisar la guardia de la congruencia entre lo que se dice y se hace, y sobre todo ante los más jóvenes. Cuando los jóvenes no ven coherencia se retiran. La juventud se entusiasma cuando el pensamiento y la acción muestran una línea de conducta ejemplar.

 

Si bien la gran mayoría de los productores son conscientes, hay que revisar la guardia de la salud ambiental y el equilibrio productivo. Sin hacer un museo del medio ambiente, hay que gestionarlo con racionalidad y respeto, aplicando Buenas Prácticas Agropecuarias.

 

Hay que revisar la guardia de la democracia. Como hombres y mujeres de campo debemos actuar más, participar más en la búsqueda de respuestas políticas superadoras y no volver a caer en los lugares comunes y en aquellas discrepancias que pueden tener las entidades que integran la Comisión de Enlace. Acá, la guardia a revisar es qué puntos en común poseen y con qué firmeza se van a plantear ante los interlocutores del Gobierno.

 

Estamos en un año electoral y por eso hay que revisar la guardia de cada uno de los candidatos que se presentan para el Congreso de la Nación. Hay que comenzar a separar la paja del trigo, para comenzar a identificar a quienes viven de la política de los que hacen de la política un camino para el bien común.

 

Hay que revisar la guardia en la Justicia, otra de las instituciones que desde hace muchos años nos viene defraudando y haciendo trampa. No es posible que, a pesar de las pruebas, muchos políticos corruptos sigan sin ser llamados a los Tribunales o que sus sentencias estén navegando en el Limbo.

 

Hay que revisar la guardia del actual Gobierno, para que no se termine enamorando de un modelo único y con la sola finalidad de eliminar la inflación. Además de ello, debería repensar modelos de inclusión, para que otra generación de jóvenes no termine en el segundo o tercer cordón del Gran Buenos Aires o en las franjas periurbanas de las grandes ciudades del interior del país, como viene ocurriendo desde los años ‘90. Todos deberíamos tener muy claro el mensaje del Papa Francisco cuando dijo: “Que nadie quede afuera, porque si unos y otros quedamos afuera no hay paz”.

 

Hay muchas guardias por revisar, especialmente las que comienzan por uno mismo y se extienden a nuestras familias, a nuestras labores diarias, a nuestra manera de ser y actuar en comunidad. Cada uno sabrá qué guardias deberá revisar. Pero hay que hacerlo con decisión y sin miedo. Nos mantendrá alertas, proactivos y con deseos de superarnos en este naciente 2025.

Escribir comentario

Comentarios: 0